Algunos estudios han revelado que los bebés que nacen con bajo peso pueden padecer hipertensión a futuro, pero lo que no se sabía, hasta ahora, es que tambièn hay una cierta predisposición a padecer enfermedades mentales como depresión o ansiedad.
Un nuevo estudio de la Asociación Americana de Psicología comenta que los bebés que nacieron con un peso sumamente bajo tienen un mayor riesgo de sufrir enfermedades psicológicas en comparación con los nacidos con un peso normal. Algunas de las dificultades que pueden presentar podrían ser problemas de atención, ansiedad y problemas sociales, comenzando desde la infancia y hasta los 30 años.
Se comprobó que en la etapa infantil tenían más probabilidades de padecer déficit de atención con hiperactividad, los adolescentes presentaban también el mismo déficit, así como problemas sociales y durante la adultez, presentaban mayores niveles de ansiedad, depresión y timidez, así como niveles bajo de comportamiento social. Este descubrimiento es importante ya que de este modo se pueden tomar precauciones desde temprana edad para proporcionar ayuda psicológica desde pequeños.
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